Esta práctica trata de combinar el retrato que vemos a la derecha en diferentes imágenes con diferentes colores para hacerlo más divertido, y sinceramente, la chica parece más guapa en el montaje. Para ello, hemos cogido la imagen sin fondo de la chica, la hemos puesto en blanco y negro (sin colores intermedios) de forma que parece un dibujo y hemos puesto de diferentes colores la cara, el cuello de la camisa y el fondo. El resultado de estos experimentos es el siguiente:
Tras hacer esto, hemos combinado los diferentes resultados en una sola imagen con cuatro cuadros que queda de la siguiente forma:
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